Si hay algo que caracteriza a Jonathan Barros (34-2-1, 18KO)
es la fe que carga para cada compromiso profesional o bien de su vida personal.
“En este momento estoy en la Iglesia”, comentó el Yoni, a pocas horas de emprender su viaje mundialista hacia México para enfrentar el próximo sábado, en Puebla, al campeón superpluma FIB Juan Carlos Salgado (25-1-1, 16KO).
“Creo que todo tiene que salir bien. Hemos hecho una buena preparación y estoy muy bien de la cabeza. A eso hay que sumarle que fui bendecido con el nacimiento de mi hija Martina”, declaró Barros, quien este lunes a las 17 viajará a su tercera chance ecuménica, la primera luego de ser campeón pluma AMB y haber perdido el título ante el panameño Celestino Caballero.
Su último día en Mendoza estuvo un poquito agitado, ya que el retador de Juan Carlos Salgado, quien defenderá por tercera vez su corona, debió cumplir con sus dos hijos en una jornada tan especial como el Día del Niño.
“Vos sabés que mi hijo (Axel) me dijo que más vale que gane porque si no, no me va a hablar nunca más”, lanzó el guaymallino, mientras dejaba salir una carcajada. Y ahí no más agregó, como para volver al clima de la pelea: “Hemos hecho las cosas bien. Ahora todo es diferente, ya que me cambió mucho la cabeza”.
Al Yoni lo acompañarán, como siempre, el laureado técnico Ricardo Bracamonte y su ayudante Juan Carlos Azcurra. “El martes también viajarán Florencio Bustos y don Roberto, que es gente que me apoyó siempre y me va a hacer sentir como si estuviese en mi casa. Creo que voy a estar como en familia”, declaró el púgil, nacido y criado en el barrio Lihué.
Respecto de la pelea, avizoró: “Sin lugar a dudas será una pelea muy dura. Estoy arriesgando en un categoría superior a la mía, pero voy a ir a ganar el título”.
Para finalizar, Barros rememoró: “Esta pelea me recuerda mucho a cuando fui a Alemania (perdió con Yuriorkis Gamboa en su primer intento mundial). Pero esta vez voy mucho más maduro y con la experiencia de haber peleado con tipos como Caballero”.
“En este momento estoy en la Iglesia”, comentó el Yoni, a pocas horas de emprender su viaje mundialista hacia México para enfrentar el próximo sábado, en Puebla, al campeón superpluma FIB Juan Carlos Salgado (25-1-1, 16KO).
“Creo que todo tiene que salir bien. Hemos hecho una buena preparación y estoy muy bien de la cabeza. A eso hay que sumarle que fui bendecido con el nacimiento de mi hija Martina”, declaró Barros, quien este lunes a las 17 viajará a su tercera chance ecuménica, la primera luego de ser campeón pluma AMB y haber perdido el título ante el panameño Celestino Caballero.
Su último día en Mendoza estuvo un poquito agitado, ya que el retador de Juan Carlos Salgado, quien defenderá por tercera vez su corona, debió cumplir con sus dos hijos en una jornada tan especial como el Día del Niño.
“Vos sabés que mi hijo (Axel) me dijo que más vale que gane porque si no, no me va a hablar nunca más”, lanzó el guaymallino, mientras dejaba salir una carcajada. Y ahí no más agregó, como para volver al clima de la pelea: “Hemos hecho las cosas bien. Ahora todo es diferente, ya que me cambió mucho la cabeza”.
Al Yoni lo acompañarán, como siempre, el laureado técnico Ricardo Bracamonte y su ayudante Juan Carlos Azcurra. “El martes también viajarán Florencio Bustos y don Roberto, que es gente que me apoyó siempre y me va a hacer sentir como si estuviese en mi casa. Creo que voy a estar como en familia”, declaró el púgil, nacido y criado en el barrio Lihué.
Respecto de la pelea, avizoró: “Sin lugar a dudas será una pelea muy dura. Estoy arriesgando en un categoría superior a la mía, pero voy a ir a ganar el título”.
Para finalizar, Barros rememoró: “Esta pelea me recuerda mucho a cuando fui a Alemania (perdió con Yuriorkis Gamboa en su primer intento mundial). Pero esta vez voy mucho más maduro y con la experiencia de haber peleado con tipos como Caballero”.