La Asociación Mundial de Boxeo, en un fallo más salvador que apocalíptico, decidió por unanimidad del Comité de Campeonatos Mundiales, en medio de su 90ª convención anual que se está celebrando en Ucrania, que el Cotón podrá defender su corona mosca (interina) sin esperar a que se resuelva su situación contractual con Osvaldo Rivero, su antiguo manager.
La noticia no tardó en viajar y el mendocino, que la remó contra viento y marea, comenzó a saborear una victoria más allá del litigio con Rivero, de quien se desvinculó el año pasado sosteniendo un “incumplimiento de contrato”.
“Estoy contentísimo. Por fin se ha hecho justicia”, lanzó el campeón mundial y agregó que “me llamó Mario Arano y me dio la noticia. Yo no entendía nada”.
–¿De qué te acordaste en ese momento?
–Todos los días hago mucho sacrificio para poder seguir adelante, por eso la noticia me puso muy contento. En ese momento sólo me acordé de los que me acompañan y están conmigo todos los días. Pensé en mi gente, que es la que me hace el aguante.
–¿Hay fecha para tu próxima pelea?
–Posiblemente sea en diciembre (tal vez en el Vicente Polimeni), pero estoy esperando la confirmación. Igualmente nunca dejé de entrenar. No quería bajar la guardia y desmotivarme.
–¿Ya te ves unificando con Hernán Márquez? (campeón regular mosca AMB).
–Sería un sueño. Es lo que estoy buscando desde hace rato. Quiero una pelea importante, ya sea con Márquez o con Giovanni Segura.
–Sería una buena oportunidad para hacer una buena diferencia económica...
–Acá no sólo pesa lo deportivo. También busco esa diferencia para poder darle un mejor futuro a mi familia, que es la que me apoya todos los días.
El Cotón una vez más ganó una batalla que no se desarrolló arriba del ring. Les hizo frente a los apocalípticos que presagiaban el final de su carrera y salió adelante sobre la base de esfuerzo y sacrificio.
Ahora mira para adelante. Quiere un futuro mejor.
¿Quién dijo que el viernes se terminaba el mundo?
Por Juani Blanco
Foto y texto: Diario UNO de Mendoza